lunes, 29 de octubre de 2012

LA EDIFICACIÓN SOSTENIBLE.


A día de hoy, la industria de la construcción consume el 50% de todos los recursos mundiales. En la ciudad de Nueva York por ejemplo los edificios son responsables de la emisión de más CO2 que la industria y los automóviles juntos, consumiendo en una hora la energía suficiente para iluminar una bombilla durante 20.000 años. Pero nuevas formas de construir y de crear las viviendas aportan soluciones y alternativas a esa sinrazón.

En los últimos años, se han ido incorporando a los edificios cientos de materiales basados en compuestos químicos sintetizados que no se encuentran en la Naturaleza en tales concentraciones, lo que implica que nuestro organismo no está preparado para el contacto con ellos. Según un informe de 2006 (1), el 70% de las personas que respiraron la nube de polvo producida por la caída del World Trade Center sufre enfermedades pulmonares. Se ha llegado a la demoledora conclusión de que, a la larga, el humo y los materiales en suspensión procedentes de las Torres Gemelas causarán más victimas que los propios atentados terroristas. Si a esto le sumamos que los sistemas de climatización son causantes de centenares de alergias, jaquecas, problemas respiratorios y que en sus conductos se reproducen enfermedades como la legionela, nos hacemos la siguiente pregunta: “¿Cómo hemos llegado a vivir en estos enormes contenedores herméticos, ineficientes, contaminantes y nocivos para la salud (2)?

HORMIGÓN, PLÁSTICO, AIRE ACONDICIONADO…
Para hacernos una idea debemos conocer algunos descubrimientos, responsables del paso de la arquitectura tradicional a la industrializada, que han modificado las soluciones constructivas a escala planetaria: El hormigón armado, los plásticos y el aire acondicionado. El hormigón aparece en escena en la exposición de Paris de 1855 y sus cualidades mecánicas revolucionan el diseño de estructuras. Pese a la cantidad de energía que consume su obtención, este avance está detrás del cambio de mentalidad y de la posibilidad de crear nuevas formas, manteniéndose, como podemos observar en la arquitectura de Carlos Raúl Villanueva, criterios de diseño capaces de aprovechar al máximo la fuente de energía principal del planeta, la luz solar. Es tras la II Guerra Mundial cuando la industria bélica, que ha desarrollado decenas de materiales de síntesis para sustituir otros naturales como la madera, el látex o el corcho, ha de adaptarse a los nuevos tiempos de paz, fijándose en la construcción de viviendas como nuevo mercado para sus productos procedentes de los residuos del petróleo. Da comienzo así todo un mundo de nuevos productos sintéticos: aislantes, sellantes, impermeabilizantes, disolventes, resinas, aditivos, lacas, conductos… que hacen olvidar rápidamente las técnicas tradicionales. Todo ello e promocionado por una potente maquinaria propagandística que omite cualquier efecto negativo e introduce en nuestras casas metales pesados, amianto, cloro e incluso cianuro.

VIVIENDO EN CÁPSULAS
Pero no es hasta la expansión del uso de aparatos de climatización de aire cuando algunos empiezan a considerar la arquitectura como algo independiente del entorno y se ven capaces de hacernos vivir en cápsulas herméticas, despreciando el gasto de energía que implica. El aire acondicionado, un invento proveniente de la industria, se empezó a aplicar en espacios para personas en 1925, en el teatro Rivoli de Nueva York, pero no es hasta los años 50 que se generaliza su uso doméstico, sustituyendo las hasta ahora casas eficientes, que garantizan el confort gracias al diseño y materiales utilizados, por una nueva arquitectura con una libertad formal absoluta que consigue de la energía fósil lo que antes obtenía gratis del sol. Una libertad que entrega gran parte de la responsabilidad profesional del arquitecto a los ingenieros climatizadores y que convierte los edificios en grandes electrodomésticos con capacidad para albergar personas.Pero esta corriente, con ser la dominante, no es la única y ya desde el principio contamos con visionarios como Fruto Vivas en Venezuela, que encuentra en la arquitectura popular un referente, entendiendo que las diferencias constructivas que hayamos en las distintas regiones son tácticas de adaptación al clima y no caprichos estéticos o convencionalismos. Ya en los años 50 ve en la casa de tapial del Páramo de Mucuchíes (3), en la de bahareque de Paraguaná o en el janoco warao, diferencias sustanciales que encierran conceptos útiles aplicables a las viviendas contemporáneas. Anticipa casas biotérmicas con sus “árboles para vivir”, la recuperación de las técnicas y materiales tradicionales o la autoconstrucción. También pronostica el descalabro de la arquitectura internacional y propone imitar los modelos de la Naturaleza para optimizar los recursos. 

OTROS DISIDENTES
Otros disidentes de la corriente formalista imperante han preferido trabajar al margen, con materiales naturales, reutilizando desechos y desconectados de las redes de suministro, como Michael Reynolds, que crea en Nuevo México sus Earthships, viviendas autosuficientes donde confluyen soluciones a las que llegó la arquitectura tradicional y cuyos diseños están concebidos siguiendo los principios físicos que rigen la Naturaleza, o Johan van Lengen, arquitecto holandés afincado en Brasil, autor del Manual del arquitecto descalzo (4) y un pionero en la bio-Arquitectura. Pero la situación muestra signos inequívocos de que algo está pasando a escala planetaria. Nuevos proyectos rompedores y potentes son prueba de un cambio de paradigma. El fin del petróleo barato, la responsabilidad medioambiental y el sentido común están llevando a promotores, gobiernos e instituciones a apostar por una arquitectura razonable y consecuente con las urgencias del siglo XXI. De esta manera el Bank of America ha optado por un rascacielos ecológico en el centro de la Gran Manzana para su nueva sede; el One Bryan Park, el segundo edificio más alto de Nueva York, ahorra dos tercios de la energía, recupera el 70% del agua y limpia el aire de la zona donde se ubica gracias a métodos pasivos diseñados por Richard Cook y Robert Fox. La nueva Academia de las Ciencias de California, del arquitecto italiano Renzo Piano, incorpora una cubierta vegetal y es considerado el edificio museístico más verde del mundo; las obras de Richard Rogers en Europa tales como el Tribunal de Amberes y la Asamblea Nacional de Gales o las futuras granjas verticales en la ciudad que propone el doctor Dickson Despommier… marcan el principio del fin de la arquitectura irresponsable del siglo pasado.

LOS IRREDUCTIBLES
Afortunadamente no toda la arquitectura tomó el camino equivocado. Las revistas y medios internacionales propagaron la arquitectura del poder, las formas impactantes y caprichosas, los arquitectos estrella y el triunfo de la imagen comercial, pero, como hemos visto antes, algunos irreductibles siguieron investigando contracorriente, surgiendo opciones, movimientos, conceptos y teorías punteras y avanzadas en el campo de la sostenibilidad donde podemos encontrar lo que será la arquitectura del futuro si queremos mantenernos en un planeta habitable. Una arquitectura basada en los principios físicos de la Naturaleza, acorde con su entorno y que tiene en cuenta el ciclo completo del uso del edificio, desde la energía gastada en su construcción y mantenimiento, hasta el destino de los materiales después de la vida útil, preocupándose especialmente para que sean saludables para sus habitantes.

TENDENCIAS SOSTENIBLES
Expondremos algunas de estas tendencias sostenibles y contrastadas que pueden servir de base para la arquitectura del futuro, una arquitectura que se parecerá más en sus fundamentos a la del siglo IX que a la del XX y que se basa en un equilibrio entre los tres pilares que la rigen: el económico, el medioambiental y el social. 

Arquitectura bioclimática Es aquella que consigue un ambiente confortable en su interior a través del propio diseño, optimizando para ello la energía renovable de su entorno a través de sistemas de climatización pasivos, es decir sin aporte de energía exterior ni equipos. El término pasivo proviene del arquitecto Edwad Mazria y de su libro Energía Solar Pasiva publicado en los setenta. En él se analizan los principios de captación, almacenamiento y distribución de energía solar para cada tipo de clima, teniendo en cuenta los cuatro factores principales de la habitabilidad: temperatura, soleamiento, humedad y viento. Sus conclusiones remiten a la arquitectura popular de cada lugar como la mejor adaptada a su entorno.

Bioconstrucción. Es la construcción responsable que utiliza materiales saludables y que no dañan al medio ambiente, recuperando técnicas tradicionales e incorporando las tecnologías más recientes para diseñar edificios adaptados al clima, al lugar y a sus habitantes. Utiliza materiales biológicos, naturales y transpirables frente a los derivados del petróleo e incorpora sistemas bioclimáticos como los invernaderos, la geotermia, los muros Trombe o la masa térmica para climatizar la vivienda. También contempla el tratamiento de los residuos producidos en la vivienda y las fuerzas electromagnéticas que le afectan.

Arquitectura biomimetica Propone un cambio hacia modelos más eficientes y efectivos basados en los sistemas vivos de la Naturaleza. Se basa en la certeza de que la evolución ha optado siempre por los caminos más rentables en términos de recursos y energía, encerrando una experiencia de 3.800 millones de años de desarrollo de la vida en la Tierra y teniendo en cuenta que nos afectan las mismas leyes. Así podemos idear sistemas de refrigeración evaporativa basados en los termiteros africanos, captar energía y calentar tomando como ejemplo el metabolismo de los reptiles o hacer estructuras ultraeficientes como el Poliedro de Caracas siguiendo las conclusiones del estadounidense Buckminster Fuller sobre el funcionamiento de la molécula de carbono.

Cradle to cradle De la cuna a la cuna es un concepto ideado por el arquitecto William McDonought y el químico Michael Braungart en el libro del mismo nombre. Propone un cambio radical en el sistema productivo que derive en una segunda revolución industrial. Basándose también en los modelos de la Naturaleza incide en que el hombre es el único ser vivo que produce residuos y cuya actividad no genera más vida sino al contrario. Reúne conceptos de bioclimática, bioconstrucción y biomímesis junto con aportaciones como el supraciclado o los activos técnicos y se pueden resumir en que todos los materiales que usemos, tanto para la construcción como para el resto de la industria, han de ser o biodegradables, volviendo a la tierra en forma de abono, o reciclables indefinidamente con el mínimo de energía, un ciclo cerrado que incluye materiales técnicos como el aluminio o el acero, que descarta cualquier sustancia tóxica y que obtiene la energía de fuentes renovables.

LAS CIUDADES
Para terminar hay que hacer mención también a la ciudad donde se enmarcarán estas construcciones. Frente al urbanismo ya superado del siglo XX, basado en el uso masivo del automóvil, han surgido en Estados Unido y Europa nuevos modelos como el Nuevo Urbanismo, el Nuevo Peatonalismo o las Ciudades Slow que reaccionan ante el modo de vida estresante y deshumanizado imperante que atomiza a los ciudadanos y tiene como punto de encuentro y aprovisionamiento a los centros comerciales. Según la visión de estas tendencias el urbanismo será más compacto, más variado y mezclará los usos de oficinas con comercios y viviendas, restringiendo el acceso de los vehículos y con una escala mas humana.Albert Einstein afirmó que los problemas importantes a los que nos enfrentamos no pueden ser solucionados con el mismo nivel de pensamiento que fueron creados. El resultado de aplicar estas teorías a la arquitectura y el urbanismo nos dará una cuidad mas parecida al resto de los sistemas biológicos de la Tierra, saludable, respetuosa con la biodiversidad y que contemple a toda la ciudadanía, teniendo en cuenta el reto de tener por primera vez en la Historia a la mitad de los casi 7.000 millones de habitantes del planeta viviendo en ciudades, resolviendo el problema de los barrios y las granjas y dando como resultado una ciudad diversa, justa, productiva, amable, acorde con su tiempo, enraizada al entorno, a la tradición histórica y cultural de cada lugar y con aire limpio que respirar.

Pablo Farfán. Artículo publicado en la revista “Bond”(abril-mayo de 2010. Caracas, Venezuela)

NOTAS
1.Las otras víctimas de las Torres Gemelas. El País. 9-IX-2006. 
2. “El síndrome del edificio enfermo: cuestionario para su detección”. American Industrial Hygiene Association 
3.Sistemas bioclimáticos y adaptación al medio de la arquitectura andina venezolana. La casa del Páramo Merideño 

miércoles, 26 de septiembre de 2012

PINTURA Y ESTUCOS CREATIVOS. Silvia Franzoni (Valderrobres)

Planificación y ejecución de la decoración de paredes: imitaciones, pátinas, texturados, estucado al fuego.
Decoración de paneles para escaparatismo, y mueble decorativo.
Pintura artística. Murales. Trampantojos.
Reintegraciones y recuperación de pinturas antiguas sobre pared.
Impartición de talleres relacionados con la aplicación de técnicas pictóricas.
Posibilidad de uso de las tecnologías informáticas para la planificación de proyectos.

Ámbitos: pintura en obra, interiorismo, escaparatismo, escenografía teatral y cinematográfica, docencia.
SILVIA FRANZONI
En la actualidad reside en Valderrobres (Teruel).
Trabajos realizados mayormente en Barcelona provincia.
Posibilidad de desplazamiento.
Tel:  678595807
Email: sinzona@gmail.com

PINTURA MURAL ARTÍSTICA
La pintura mural incluye una amplia variedad de técnicas pictóricas que usan como soporte un enlucido aplicado sobre ladrillo o piedra. Ha sido uno de los soportes habituales en la historia del arte. La piedra es el material más antiguo que ha soportado pintura mural sin enlucidos (pinturas prehistóricas). Más tarde se fueron aplicando capas de preparación que hacían de puente para soportar la capa pictórica y que aportaban uniformidad, finura y condicionaba menos el color. Estos revestimientos podían estar hechos con una carga y cola, con una base de cal (frescos) o actualmente es más habitual el empleo del yeso para interiores. Se puede pigmentar el enlucido para la pintura posterior.
La representación figurativa de la naturaleza requiere una serie de dibujos preparatorios y pruebas de color antes de la ejecución en pared. El traspaso a escala aumentada del dibujo puede hacerse con proyector o mediante la técnica antigua de la cuadrícula. El enlucido debe estar adecuadamente preparado para permitir la aplicación pictórica sin diferencias de absorción del muro y sin humedades. Las humedades pueden causar problemas como por ejemplo la alteración del color o pérdidas de pintura.
Las cualidades estéticas de  transparencia se conseguirán mejor con técnicas acuosas a base de colas. Las cualidades de cubrición total o tintas planas requerirán acrílicos u óleos, mayormente. Suelen emplearse técnicas al agua -con aglutinantes tipo colas naturales (temples), sintéticas (acrílicos, vinílicos)- o grasas –aceites vegetales. El barnizado es aconsejable para una mayor protección de la película pictórica.
El fresco es una técnica distinta conocida desde la antigüedad que no requiere colas sino que sostiene el pigmento mediante una cristalización del enlucido de soporte.
TEXTURADOS DECORATIVOS E IMITACIONES
Las imitaciones de mármoles o madera suelen realizarse sobre soporte de pared o madera preparadas u otro tipo de soporte rígido. Se realizan con técnicas modernas, empleando óleos y barnices o también pueden utilizarse técnicas acuosas que después se barnizan.


La imitación de mármoles por excelencia, muy utilizada en el S. XIX e inicios del XX para arrimaderos o zócalos decorativos es el estucado al fuego, que se realizaba sobre una base de estuco de cal fresca a la que se aplicaba una pátina jabonosa coloreada que era pulida en caliente. Adquiere unas profundidades de color inigualables. Solían incluir esgrafiados decorativos en los márgenes.

Estarcido y  Esgrafiado
RECUPERACIÓN DE PINTURAS Y ESTUCOS
La posibilidad de recuperar pinturas murales de cierta antigüedad puede requerir una datación aproximada. También habrá que saber la técnica que se empleó antes de intervenir. En casos en que las pinturas no sean de valor, se mira de compaginar su uso decorativo con el interés histórico y testimonial que puedan tener.


El estuco es una pasta de grano fino compuesta de cal apagada (normalmente, cales aéreas grasas) que puede llevar mármol pulverizado o arena, pigmentos naturales, etc. Se endurece por reacción química del hidróxido cálcico o cal apagada (CaOH2) con el dióxido de carbono (CO2) y se utiliza sobre todo para enlucir paredes y techos. Puede llevar cierta parte de yeso.

El estuco bien aplicado prácticamente no envejece ni exige mantenimiento. Variando las proporciones y tipos de arenas o ciertos acabados y pigmentos, admite diversos empleos tanto en interiores como en fachadas, entre los que destacan el modelado y tallado para obtener formas ornamentales, el pulido para darle una apariencia similar al mármol y la pintura al fresco, todos ellos con fines de revestimiento y/o decorativos.
 
ESTARCIDOS Y ESGRAFIADOS.
El estarcido, también llamado esténcil (del inglés stencil) es una técnica artística de decoración en la que se emplea una plantilla con partes de un dibujo recortadas y en cuyos huecos se aplica pintura sobre un fondo que puede ser papel, pared, etc. La pintura puede aplicarse a pincel, esponja, aerógrafo...Así se obtiene un dibujo con la forma del diseño de la plantilla. Las repeticiones lineales empleando esta técnica se conocen como “cenefas”.
 

El esgrafiado es una técnica decorativa que se aplica sobre el revoque de un muro. Consiste en aplicar un enlucido pigmentado sobre una capa de otro color. Mediante una plantilla agujereada se traspasa un dibujo al revoco fresco y antes de que seque, en función del diseño, se retiran partes del revoco hasta descubrir la capa de debajo creando un efecto de positivo-negativo de color en el diseño resultante.
Fue muy empleado en fachadas de edificios de grandes ciudades del s XIX y principios del XX, a menudo con motivos geométricos de repetición.


jueves, 13 de septiembre de 2012

El Cobijo en su segunda visita a Calaceite. El Calaceite Monumental

Y de nuevo el Cobijo nos vamos a Calaceite, esta vez, visitamos el Calaceite monumental de la mano de Joaquín (Lo Pardet).
Primera parada en La Fuente,  conjunto hidráulico construido todo ello en piedra. 

La zona abovedada  alberga el acceso a la mina por la cual discurre el cauce de agua, también una obra magistral en piedra, abovedada que tendrá metros y metros de longitud.
Como nos cuenta Joaquín, esta entrada  servía de acceso para la limpieza de dichas canalizaciones, que traían el agua que manaba desde lo alto del monte e iba a parar a la fuente y al lavadero, ambas cosas utilizadas antiguamente por las gentes del pueblo.
Nuestra segunda vista es la Poblado (o despoblado) Ibérico de San Antonio.

Dicho poblado data sus inicios en el siglo V a.c. El acceso principal al poblado se realizaba por el Norte donde existe, junto a la muralla y la base de un gran torreón, una pequeña alberca o balsa que recogía las aguas de lluvia en una depresión natural acondicionada para ese uso. Las viviendas, de planta rectangular, se ordenan a lo largo de un eje central y varias terrazas dispuestas en la zona Oeste del cerro, existiendo varias calles empedradas que dan acceso a las mismas. Los muros de las casas se apoyaban unos en otros y aprovechaban los desniveles naturales del terreno pudiendo alcanzar una altura de dos plantas.
Se iniciaron las excavaciones en 1902 y en 1931 fue declarado Bien de Interés Cultural. El  poblado está situado en el extremo meridional de la sierra de San Cristóbal.
Ermita de San Cristóbal y el Calvario

Impresionante conjunto monumental en el que el edificio principal, la Ermita, es del siglo XVIII, de estilo barroco con paredes de sillería y consta de una sola nave con bóveda de arista y capillas laterales.

El calvario se desarrolla en la ladera norte del cerro donde se encuentra la ermita y consta de 14 capillas que definen las estaciones del Via Crucis.
Siguiente visita, Ermita de Santa Ana.


Se construyó en 1621.
La ermita es de estilo renacentista y está construida en piedra de sillería.
A principios de 1700 hay documentación de procesiones a la ermita con la reliquia de la Santa Espina de la Iglesia Parroquial en rogativa de lluvias.
En la actualidad se celebran las fiestas de primavera que agrupan Santa Ana, San Isidro y Santa Espina con una romería a la ermita.
Y como final de nuestra visita, el que pensamos es el monumento que mejor hace honor al pueblo de Calaceite, como no...... las antiguas prensas del aceite.

Dicho fragmento, según Joaquín, no hace mucho formaba parte de un conjunto de aproximadamente 14 o 15 prensas, en las cuales se obtenía el aceite, que fue el principal recurso de la población durante tanto tiempo……
Esta visita nos reafirma en la idea de que Calaceite fue un pueblo que albergó gran esplendor, por tanto hay que valorarlo y cuidarlo como se merece. Desde las administraciones habría que fomentar las ayudas a la rehabilitación y restauración de edificios, que de momento se está manteniendo gracias al buen hacer de los vecinos.

jueves, 12 de julio de 2012

Restauración de fachada: Vivienda Unifamiliar, Alborge (Zaragoza)

Materiales utilizados: Cal aérea, cal hidráulica, ladrillo macizo envejecido y carpintería de madera.

La restauración de la fachada consiste en:
Eliminación de las múltiples capas de revoco, en ocasiones revocos de mortero de cemento que estaban dañando considerablemente la fábrica sobre todo en las zonas donde el ascenso de la humedad por capilaridad era más significativo.
Picado de paramentos en aquellas partes donde el material de revoco era yeso de gran dureza, este picado es fundamental para conseguir una superficie de agarre óptima.
Antes de la aplicación del nuevo material de revocos se evalúa la calidad de fábrica en los distintos paños de fachada para combinar elementos de fábrica vista con fábricas de menor calidad revocadas.
A voluntad de los propietarios, se opta por la utilización de dos tipos de cales, la cal hidráulica para las zonas donde la humedad es más patente (en contacto con el terreno) y cal aérea para el resto de la fachada.
Las antiguas carpinterías se sustituyen por otras nuevas también de madera y se colocan contraventanas de madera.
Así mismo se sustituyen los solaretes de baldosa de los huecos tanto de ventanas como de la puerta de acceso, por otros ejecutados en ladrillo macizo envejecido.
El resultado es una fachada que recupera su forma original, ligeramente irregular, adaptándose a la fábrica existente.
FACHADA OESTE
Antes de la intervención
Después de la intervención
  
FACHADA SUR
                   Antes de la intervención                             Después de la intervención

lunes, 9 de julio de 2012

El Cobijo Arquitecturas en su visita a Calaceite (Teruel).

Calaceite es un pequeño pueblo de la provincia de Teruel situado en la zona de los Puertos.
Cuenta con un importante y asombroso casco antiguo en el que predominan las calles estrechas y en pendiente y las fachadas de piedra.
Aquí venimos a conocer a un bioconstructor, “Lo Pardet”, empresa del pueblo y con gran experiencia en trabajos de rehabilitación dentro del mismo pueblo de Calaceite.
Hacemos un recorrido, en el que Joaquin nos va  mostrando sus diferentes intervenciones en el casco antiguo.
Ejemplos de fachadas con sus gárgolas.
 
 
Las piedras están extraídas de canteras de la población, y convenientemente talladas y repicadas van tomando formas de dintel,  jamba, alfeizar  e incluso motivos orgánicos.
Más que un trabajo de albañilería se puede decir que es un trabajo de cantero.
Las construcciones de “Lo Pardet”, buscan utilizar en su mayor parte materiales locales y recuperar técnicas de construcción tradicional de la zona.
También intentan fomentar la recuperación y el uso de las cisternas de recogida de agua pluvial y los trujales.
Los materiales con los que trabajan son la piedra, forjados de madera y recuperación de cañizo en cubiertas, así como también fomenta el uso de materiales como la cal y aglomerantes de barro.
Seguro que nos volvemos a dar otra vuelta por Calaceite, que todavía nos quedan muchas más cosas por descubrir.

miércoles, 27 de junio de 2012

CONSTRUCCIÓN PARA LA VIDA

Construcción para la vida
Pablo Peris
Gran parte del crecimiento económico de España en los últimos 15 años se debe al auge del sector de la construcción. Según datos del Ministerio de Fomento publicados por el INE, su punto álgido se produjo en el año 2006, cuando se construyeron 230.000 edificios. Es decir, 737.000 viviendas. Una cifra que duplica la registrada tan sólo ocho años antes y que suponía más que la suma de todas las construidas en el resto re la Unión Europea.
Desde entonces, este sector ha registro una caída de casi el 80% hasta situarse en poco más de 90.000 viviendas construidas en 2010. ¿Y ahora qué? ‘Renovarse o morir’ es la frase que está en boca de todos. Pero, ¿cómo? Una de las últimas apuestas es la bioconstrucción. Los expertos esperan que “esta crisis ayude reflexionar sobre el uso racional de las cosas y sobre la necesidad de un ahorro energético, aunque solo sea por una cuestión económica”, explica Carlos Gómez, socio de BioHaus. Se trata de una empresa que desde 1997 apuesta por la distribución de materiales ecológicos.
Y es que ese es, inevitablemente, el futuro. En la actualidad, la normativa de la Unión Europea tiene una marcada tendencia hacia la construcción ecológica. Según Toni Marín, experto en bioconstrucción y editor de la revista EcoHabitar, “lo ecológico se impone por motivos económicos”, ya que “cuesta menos dinero invertir ahora y no contaminar que tener que reparar el daño a posteriori”. Un claro ejemplo de esta tendencia es que a partir de 2015 todos los edificios públicos tendrán que ser de energía cero. Es decir, generar al menos la misma energía que consumen.

Sin embargo, son muchos los que siguen considerando que la construcción ecológica es más cara. Marín se muestra tajante y asegura que “la bioconstrucción no sale más cara que la arquitectura tradicional”. “Si los materiales sintéticos pagaran los costes medioambientales que generan, las cosas cambiarían”, explica Carlos Gómez, quien añade que, aunque en algunos casos si que sean más caros, “dentro del precio de un material hay que contemplar su ciclo de vida, sus características, sus beneficios, y valorar la mejora que se obtiene con su uso”. La clave, según Marín es que “lo que es más caro se amortiza con el tiempo”.
Por su parte Teresa García, Directora del Grupo de investigación de Materiales de construcción a partir de residuos vegetales de la Universidad Miguel Hernández, señala que la clave está en la oferta y la demanda: “Si se vende mucho se pueden abaratar los precios, pero si venden poco, el precio tiene que ser caro. No es lo mismo hacer una producción en cadena que hacer cosas concretas. Más que el material es la mano de obra, ya que no se puede industrializar”.
Pero no hay que olvidar que, en contra de lo que muchos creen, la bioconstrucción no afecta sólo a la ecología. Marín la defiende como “construcción para la vida”, ya que además del respeto medioambiental, se tiene muy en cuenta que sea saludable. “Algunos productos pueden ser dañinos para la salud”, explica Marín. Esto se debe a que ciertos componentes pueden “emitir sustancias tóxicas durante su fabricación o en su ciclo de vida”, algo que no sucede con los materiales ecológicos.

Según Teresa García, “el mayor problema son los adhesivos y las resinas”, como por ejemplo, la urea formaldehido. Este polémico material es ampliamente utilizado “en tableros de aglomerado”, explica. Sin ir más lejos, la empresa sueca IKEA se vio obligada a minimizar el uso de este componente debido a las protestas recibidas. Marín cita también “los metales pesados que se utilizan en el cemento para conseguir ciertos efectos”. En este caso el problema es que “ya está puesto y no es un material que se pueda sustituir”, añade. Otro elemento de riesgo es, por ejemplo, el amianto, “un cancerígeno declarado” que se encuentra presente en la uralita. “Durante su vida útil no hay problema, pero cuando se rompe emite partículas de esta sustancia”, explica.
Precisamente la demolición es otro de los aspectos que la construcción tradicional no tiene muy en cuenta pero recibe gran consideración en la bioconstrucción. “Es importante que los materiales sean fácilmente reciclables”, comenta García, o al menos, “que contaminen lo menos posible en la demolición”. Este factor es muy importante, por ejemplo, en el caso de los plásticos “que son muy baratos pero cuestan mucho de destruir”.
Para ello bastaría con apostar por materiales ecológicos. Eso sí, con criterio. “Hoy en día se está construyendo mucho con bambú o con paja”, explica García, que a su vez critica que no se apueste por materiales locales, como la caña. En este sentido, Marín destaca “la importancia de apostar por los materiales más cercanos”. Un ejemplo, explica, lo tenemos en los aislantes: “la fibra de coco es muy ecológica, ¿pero traer esa fibra de coco desde América lo es? Aquí tenemos otros aislamientos como el corcho o la lana de oveja que también son válidos”. Por eso se tiene en cuenta la huella ecológica, es decir, “el impacto que un producto, servicio o transporte produce en el medio ambiente”. Y eso incluye desde su fabricación, hasta su destrucción, pasando por la vida útil, transporte, etc.
El problema al que se enfrentan en muchas ocasiones es la falta de certificaciones que avalen a los materiales empleados. García asegura que “en España no hay homologación de productos ecológicos”, algo que en ocasiones frena la producción de productos locales. “Hace falta una normativa, pero eso requiere pruebas para demostrar que se cumplen los requisitos”, algo que “todavía no está desarrollado”, explica. Esto hace que no sea un sistema ampliamente extendido, ya que las construcciones oficiales requieren de materiales con el certificado de la CE. Por su parte, Marín explica que están tratando de desarrollar un sistema de autocertificación: “Se llama Ecómetro y a través de internet se podrán introducir los datos de una construcción para obtener un sello totalmente libre y gratuito”.
Este proyecto servirá como referencia, pero la queja de Marín es que sigue sin existir una homologación oficial: “El problema es que la bioconstrucción no es un método de construcción que esté certificado, no hay ninguna entidad que lo pueda hacer”. Así pues, es difícil hacer una valoración de lo que es o no bioconstrucción. En cuanto a los criterios, Carlos Gómez habla de “tener en cuenta el emplazamiento, la orientación y el aprovechamiento de energía, así como el diseño y la integración en el paisaje”. Otros aspectos relevantes son “el consumo energético posterior del edificio y el consumo energético de la fabricación de los distintos materiales utilizados”, además de “la gestión de los residuos”. Sin embargo, los criterios no terminan de estar claros. Por eso, “hace 20 años se establecieron unos parámetros basados en lo que se había construido en otros países más avanzados”, explica Marín. Países como Alemania o los países nórdicos, que nos llevan años de ventaja en este aspecto.
En cualquier caso, y a pesar de la falta de regulación, la bioconstrucción seguirá tratando de ganar terreno a la construcción tradicional, con la esperanza de que los beneficios ecológicos, económicos y para la salud, sean motivo suficiente para convencer a las nuevas generaciones.

Publicado por:  + CIENCIA (revista de ciencia e investigación en la provincia de Alicante)http://www.masciencia.info/

miércoles, 20 de junio de 2012

Earthship, una nave para nuestro paso por la tierra

La Earthship, no es una casa ecológica aunque cumple esa función es una nave que nos permite navegar en esta tierra, sin dejar huella, sin abusar de la energía, usando el sol, el viento y la lluvia para funcionar, La Earthship recibe de su entorno y se lo da a sus tripulantes, genera comida y calefacción sin esfuerzo, para que nuestra vida sea mas simple y nos podamos dedicar a tareas mas importantes.

Michael Reynolds, cansado de trabajar la arquitectura convencional, decidió usar elementos de desecho para construir y desarrollar un sueño. Para ello, se trasladó con su familia a Taos (Nuevo México) en el año 1978. Allí, donde la especulación urbanística aún no existía, comenzó una aventura que hoy en día es todo un fenómeno que se ha trasladado por todo el mundo.
Durante cerca de 25 años, experimentó con diferentes modelos de diseño y materiales hasta encontrar un sistema constructivo basado en la reutilización de materiales de desecho, como llantas de vehículos, botellas de vidrio y botes de aluminio. Incluso, en los primeros tiempos desarrolló y patentó un ladrillo a base de latas de cerveza. Hoy, en Taos, Nuevo México (EE.UU.) en una extensa llanura de casi dos mil metros de latitud, se puede encontrar una comunidad que vive en Earthships,  perfectamente integrados con el entorno, ecológicos y completamente autosuficientes.

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En la actualidad, es la empresa Earthship Biotecture la que se encarga de realizar los proyectos de viviendas que van surgiendo, siempre basados en la idea de Reynolds. Sus equipos de constructores se desplazan a cualquier parte del mundo para desarrollar el proyecto y realizan una labor de divulgación y formación impartiendo seminarios y cursos de aprendizaje de esta técnica constructiva.
Podemos ver esta historia de lucha y construcción en el documental "Garbage Warrior" disponible en ecocosas.com.
Dentro de la filosofía de la Earthship esta la autoconstrucción, lo cual abarato los costos, ya que son relativamente sencillas de construir, Michael Reynolds escribió tres libros con todos los conceptos, planos y formas de construir la earthship, mas abajo están a disposición de los lectores de ecocosas.com para descargar.
Principios constructivos de la Earthship
1) Temperatura Térmica: calefacción solar y refrigeración
Los Earthships mantienen la temperatura confortable en cualquier clima. De acuerdo a la Biotectura de Reynolds, el planeta tierra es una masa térmica de estabilización que proporciona la temperatura sin cables o tuberías. El sol es una “central nuclear”, que también ofrece energía sin necesidad de cables o tuberías.



esquema de dia Earthship, una nave para nuestro paso por la tierra


esquema de nochereducido Earthship, una nave para nuestro paso por la tierra

2) Electricidad con energía solar y eólica
Los Earthships tienen capacidad de producir su propia electricidad a través de un sistema de energía fotovoltaica y eólica. Dicha energía se almacena en baterías y se suministra a los enchufes eléctricos. Estas edificaciones pueden contar con varias fuentes de energía, todas automatizadas, incluyendo la red de Internet.

tejado energetico Earthship, una nave para nuestro paso por la tierra

3) Tratamiento del agua
La Biotectura aprovecha al máximo el agua lluvia y reutiliza todas las aguas residuales, tanto para uso dentro como fuera del hogar, ayudando a la producción de alimentos y a la jardinería sin la contaminación de los acuíferos. Los inodoros se surten con las aguas grises sin olores.
4) Construcción con materiales naturales y reciclados
Un hogar sostenible debe hacer uso de los materiales nativos, es decir los que crecen naturalmente en el área local. Además aprovecha al máximo materiales reciclados para aminorar su huella de carbono
5) Recolección del agua
Toda el agua de lluvia y nieve es recogida en los tejados y llevada a un gran depósito que se encargará de distribuirla por la casa. La depuración se basa en un ingenioso sistema de reciclaje. Las aguas grises pasan a una depuradora instalada en el invernadero, donde las  plantas ornamentales y comestibles (inmensas plataneras y otros frutales crecen  en condiciones ideales) encuentran todas sus necesidades de nutrientes, humedad y calor. De allí, el agua, es llevada a la cisterna del inodoro. Asimismo, las aguas negras son depuradas en unos digestores solares, y de los que se extrae el compost que se utilizará para las plantas de los invernaderos.

recogida de lluvia Earthship, una nave para nuestro paso por la tierra
tejago recolector Earthship, una nave para nuestro paso por la tierra
celula botanica interna alargada Earthship, una nave para nuestro paso por la tierra

6) Producción de Alimentos
Los Earthship se valen de humedales, (áreas exteriores que contienen cientos de galones de agua de los lavamanos y la ducha) como un buen lugar para sembrar productos frescos.

Por manzana El 26 de mayo de 2012 en http://ecocosas.com/arq/earthship/